Poco más de 300 puestos que ambulantes y comerciantes formales habían instalado ocupando la avenida Pucará durante muchos años fueron desinstalados y demolidos durante los primeros días de trabajo para recuperar esta vía pública junto al mercado La Hermelinda.

El alcalde de Trujillo, Daniel Marcelo Jacinto, al inicio del cuarto día de trabajo, estuvo en la zona junto al general PNP Lucas Nuñez constatando los trabajos de remoción de escombros generados y su erradicación.

El burgomaestre agradeció a la autoridad policial por retomar el apoyo que por algunos días se minimizó debido al temor de rebrote de actos delictivos en las calles. “El movimiento de tierras debe quedar terminado este fin de semana. Los comerciantes están ayudando”, manifestó.

Esta avenida no se va quedar con piso de tierra. Se ampliará la losa de concreto, lo mismo que algunas calles de la periferia que quedaron inconclusas. Igual se hará en la parte alta de La Hermelinda, en av. Los Laureles, donde Sedalib va a cambiar los colectores antes de continuar con la intervención edil, añadió.

LA HERMELINDA
Un reducido grupo de personas aludía que no se puede intervenir en la reorganización de pasadizos de La Hermelinda, porque se trata de un mercado privado, olvidando que eso es área pública y hay ordenanzas que regulan el funcionamiento de este tipo de negocios.

Marcelo indicó por otra parte que el mercado se va a reabrir siempre y cuando todos los pasadizos queden libres; y que se está acompañado a los comerciantes para reabrir en el menor tiempo posible.

El cierre fue una medida muy dura e inevitable, ahora todo depende de la organización y trabajo de los comerciantes, a los que estamos apoyando. Si en los 15 días no se cumple la meta se tendrá que prolongar unos días más, recalcó.

“Muchos dirigentes estuvieron presionados y amenazados por la delincuencia, pero no se podía seguir viviendo así. Eso se acabó. Cuando la reorganización termine esto tendrá condiciones totalmente diferentes”, dijo.

Estamos tratando que la afectación sea lo menos posible para ellos y los compradores. Hemos reubicado a 300 comerciantes en La Rinconada y les estamos dando todas las facilidades. “Lo que se tiene que garantizar es que la ciudad no quede desabastecida de productos de primera necesidad”, añadió.