En el 2023, los liberteños gastaron de su propio bolsillo un promedio de S/ 421 por persona para atenciones médicas y compra de medicamentos, ante la incapacidad del Sistema Nacional de Salud para brindarles dichos servicios de manera eficiente, según estimaciones de la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho), consignadas por ComexPerú.

Se trató del sexto mayor gasto de todo el país, ubicándose solo por detrás de Lima (S/ 588), Lambayeque (S/ 556), Ica (S/ 504), Arequipa (S/ 488) y Áncash (S/ 434). Además, si bien la cifra significó una reducción del 10.7% respecto a los S/ 472 del 2022, aún se localiza por encima de los S/ 370 (+13.8%) del 2019, antes de la pandemia del COVID-19.

“En todos los departamentos aumentó el gasto promedio anual por persona para adquirir medicamentos y atenciones de salud respecto al 2019. Además, casi todo el gasto de bolsillo total a nivel nacional se concentra en la población no pobre, según estimaciones del Minsa. Esto porque las personas en situación de pobreza, que están afiliadas al SIS en su mayoría, no tienen otras opciones para acceder a consultas o medicamentos por su cuenta”, advirtió ComexPerú.

En general, en el 2023, el gasto de bolsillo per cápita de los peruanos por atenciones médicas y compra de medicamentos llegó a S/ 444, de acuerdo con la Enaho. De ese total, cada persona destinó S/ 275 para atenciones médicas, en promedio, por la falta de una cobertura efectiva de los seguros de salud, donde se reportó la mayoría del incremento respecto con 2019; y S/ 169 para la compra de medicamentos. “El incremento se explica por el colapso del Sistema Nacional de Salud durante la pandemia, del cual todavía no termina de recuperarse”, anotó ComexPerú.

La cifra del 2023 fue menor a la del año anterior (S/ 455), pero continuó por encima de los niveles del 2019, cuando el gasto se ubicaba en S/ 344 por persona. En ese marco, ComexPerú puntualizó que el gasto de bolsillo acumulado por atenciones y medicamentos ascendió a S/ 63,844 millones entre 2019 y 2023.

“La gran mayoría del desembolso se concentró en la población asegurada, porque la población sin seguro reportó un acumulado de S/ 11,112 millones. Es decir, las familias gastaron S/ 52,732 millones adicionales para cubrir los medicamentos y atenciones que no recibieron con el seguro que tenían”, señaló.

Ante esta situación, el gremio consideró que “la precariedad del sistema de aseguramiento público no debe seguir ignorándose”. “El incremento en el gasto de bolsillo encarece el costo de vida y aumenta la desigualdad. Esto debido a que la salud de la población de escasos recursos depende principalmente del Estado”, anotó.