La Asociación de Contribuyentes del Perú recomendó como primer paso modernizar la Sunat y capacitar a su personal para que actúen de manera más transparente y menos arbitraria. La propuesta consiste en que la entidad se convierta en un órgano autónomo que no dependa del MEF.

La presión tributaria es más elevada para las empresas, inclusive, debido a que los contribuyentes aportan en un mayor porcentaje al Impuesto a la Renta (IR) y el Impuesto General a las Ventas (IGV). Esto desalienta la inversión privada, pero también detiene la competitividad en el mercado nacional.

 

Por ejemplo, si comparamos el pago de impuestos del sector minero, podemos observar que, según un estudio del Instituto Peruano de Economía (IPE), en Perú una empresa minera destina el 47% de sus utilidades en el pago de tributos, solo superado por México. Otra es la historia en Canadá, Australia y Chile, donde el monto es mucho menor.

 

Además, si se analiza solo la “presión fiscal formal”, entendida como la presión tributaria sobre el sector formal de la economía según la Unión Industrial Argentina (UIA), el Perú está en el quinto puesto entre los 30 países que componen el 86% del PBI mundial, superando a Alemania, España, Canadá e Italia.

 

Si el pago de impuestos asfixia al sector formal, no podemos esperar que los trabajadores informales busquen caminos inmediatos para gozar de los beneficios que ofrece la Ley peruana laboral. Por ende, el presidente de la Asociación de Contribuyentes del Perú (ACP), José Ignacio Beteta, señaló que, para fomentar la formalización, se requiere implementar incentivos y simplificaciones tributarias para que más negocios ingresen al sistema formal.

 

Así, calificó la migración al sistema formal como una “tarea titánica” para el país, pues existen diversos caminos y mecanismos que deben afinarse para concretar esta tarea, sobre todo, si consideramos que el índice de informalidad supera el 70% a nivel nacional. “Se debe pensar en cómo hacer más competitivo al sector formal para que esto atraiga a los informales”, dijo.

 

SOLUCIONES A LA VISTA

 

Entre las propuestas para mejorar el sistema tributario se encuentra la reforma de la Superintendencia Nacional de Aduanas y Administración Tributaria (SUNAT). El primer paso sería modernizar la entidad y capacitar a su personal para que actúen de manera más transparente y menos arbitraria. La propuesta consiste en que la SUNAT se convierta en un órgano autónomo que no dependa del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), lo cual garantiza que las decisiones que adopta tienen una fuerte carga técnica y más no política.

 

En la misma línea, la ACP propone la ampliación de la base tributaria mediante la formalización de los grandes informales. Es decir, en lugar de seguir imponiendo más impuestos a los contribuyentes, buscar mecanismos que atraigan a las empresas informales a la formalización. Para lograrlo, se requieren de políticas públicas que fomenten el crecimiento de pequeñas y medianas empresas, así como incentivos para la inversión privada y formal​​.

 

Por último, también se debe mejorar la estabilidad normativa y jurídica. Esto hace referencia a la creación de mecanismos legales que obliguen a la administración tributaria a seguir interpretaciones consistentes. La jurisprudencia es sumamente vinculante, por ello, las consultas institucionales deben ser respetadas y aplicadas de manera uniforme. Esto reducirá la incertidumbre y fomentará un entorno más favorable para la inversión y el cumplimiento fiscal​​.