Un proyecto que podría revolucionar los estudios de angiografía por resonancia magnética desarrollan docentes de la Universidad Privada Antenor Orrego (UPAO). El objetivo es obtener nanopartículas de quitosano con aplicación en el transporte de un agente de contraste que permita obtener imágenes mucho más nítidas y confiables para el tratamiento de pacientes con problemas en los vasos circulatorios.

El líder del equipo, doctor Luis Manuel Angelats Silva, docente investigador de nanotecnología en el Laboratorio de Investigación Multidisciplinaria de la UPAO, explica que se trata de un proceso por el cual se obtiene nanobarras de quitosano extraído de residuos de langostino, a las que se puede fusionar el agente de contraste y ayudar en el tratamiento de enfermedades cardio o cerebrovasculares, de pie diabético y otras que afectan los vasos sanguíneos.

La propuesta de estudio permitiría disminuir la exposición del cuerpo al gadolinio, elemento cuya aplicación en dosis altas produce fibrosis sistémica nefrogénica, a través del uso de microagentes biocompatibles o biodegradables que actualmente vienen siendo utilizados en diversos campos de la medicina, agricultura e industria pero que, en este proceso, mantiene un nivel inédito en su aplicación.

El investigador asegura que este proyecto tendrá repercusiones positivas para el campo del aprovechamiento de los recursos marinos no explotados, así como para el suministro de materias primas en medicina y farmacia, es un primer paso para abrir nuevo mercado para la producción y comercialización de quitosano, y pone a la UPAO a la vanguardia en este tipo de investigación.