Frente a los cambios que sufre el comercio internacional los exportadores requieren adecuar su oferta exportable. En ese sentido, los granos andinos necesitan de políticas que impulsen el ordenamiento en los cultivos para incrementar las exportaciones y permitan seguir diversificando mercados, señaló Carlos Lozada, vicepresidente de ADEX, en la inauguración de la III Convención de Granos Andinos en Cusco.
En el evento, en el que estuvo acompañado por Miguel Maldonado, coordinador nacional del Programa de Granos Andinos de las Naciones Unidas; Víctor Baca, gerente regional de Agricultura del Gobierno Regional de Cusco; y Mirna Zuzunaga, directora de Negocios Agrícola del Minagri, expresó que es de vital importancia mantener un orden por el gran impacto que representa esta actividad productiva en miles de familias.
El vicepresidente de ADEX señaló que la mejor prueba de la apreciación que tienen los granos andinos en el mercado internacional es que en el periodo 2010 -2014 la exportación tuvo un crecimiento extraordinario de 1391% en monto FOB y de 667% en kilos.
Sin embargo, indicó que a septiembre de este año estos productos tuvieron una disminución de 24% respecto al mismo periodo del 2014, por lo que se exportó solamente US$ 122.5 millones, debido a una oferta desorganizada y a restricciones de acceso al mercado al no haberse establecido los Límites Máximos de Residuos (LMRs) para EE.UU.
Carlos Lozada recordó que EE.UU. sigue siendo el principal destino que representó el 45% del total despachado. Luego siguieron Canadá (7%), Holanda (7%), Alemania (5%) y Reino Unido (5%). “También existen otros con gran potencial como Italia, Australia, Japón, Brasil, España, Israel y Francia que se están empezando a explorar y que reflejan la tarea integral que tenemos que hacer, es decir, abrir mercados de manera coordinada. Asimismo, China, que se está trabajando en el acceso fitosanitario”, refirió.
Agregó que la quinua, llamada “Grano de Oro de los Andes”, es el principal producto de este sector con envíos de por US$ 107,4 millones entre enero y septiembre, situándose en el 8vo lugar de las exportaciones agrícolas no tradicionales y representando el 87.7 % del total despachado.
Impacto social
“En ADEX reconocemos el esfuerzo que realiza el sector empresarial al abrir nuevos destinos y desarrollar nuevos productos, ya que esto tiene un impacto sustancial al desarrollo de la economía porque genera más empleo digno y formal, y además, promueve la descentralización del país, esencia verdadera de la inclusión social”, manifestó el representante gremial.
Consideró que uno de los aportes más relevantes de la agroexportación es que las empresas asumen la responsabilidad de ganarle terreno a la informalidad, a la pobreza y a actividades ilícitas como el narcotráfico que tan enraizadas están en la estructura de la economía.
“La reflexión de fondo es que es absolutamente necesario que trabajemos juntos: productores, exportadores e instituciones públicas y privadas para afrontar con éxito los problemas que estamos experimentando. Tenemos razones para estar atentos a los riesgos, pero también para estar optimistas”, finalizó Carlos Lozada.
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