Nuestro país presenta ciertas carencias en lo que a carreteras y vías concierne, especialmente si nos alejamos de las grandes ciudades de la costa y nos centramos en las zonas rurales. Lugares en los que existen vías no pavimentadas o trochas peligrosas y en deterioro que no solo dificultan el acceso a diversas zonas, sino que también ponen en riesgo la vida de las personas que se trasladan en vehículos diariamente.

Sin embargo, existen maneras de darle solución y mejorar la situación de las vías con el fin de facilitar la circulación y convertir estas trochas en caminos pavimentados. En esta oportunidad, Ángela Madariaga, Superintendente de la Unidad de Negocios de Infraestructura vial de Pacasmayo, brinda algunos consejos para la rehabilitación de vías rurales de manera efectiva:

1.  Seleccione los materiales adecuados: Los materiales utilizados para la rehabilitación de vías rurales pueden variar dependiendo de las condiciones climáticas, el uso de la vía y el presupuesto. A nivel de ambiente, el suelo estabilizado con cemento permite usar materiales existentes en las vías a construir y rehabilitar, evitando la explotación adicional de fuentes de materiales.

Las mezclas permiten aprovechar e incorporar suelos locales, es decir,  se genera menos costo y menos impacto al medio ambiente. En este sentido, una opción a utilizar es el cemento VíaForte, cuyo objetivo es la estabilización de suelos que liberan calor durante el proceso de hidratación como por ejemplo, la arcilla, además, mejora la trabajabilidad en el proceso constructivo, es decir, la facilidad con la que un material puede ser trabajado y manipulado durante la construcción, y ofrece mayor durabilidad a las vías.

 

Este proceso consiste en la transformación del suelo del que se dispone en un material de construcción de calidad, garantizando la permanencia de su compactación en el tiempo. Además, estabilizar suelos con cemento aporta resistencia a la erosión y a todo tipo de clima, lo que significa que puede ser utilizado incluso en las zonas altoandinas con el clima más inclemente”, agregó la especialista de la cementera.

 

2. Realice mantenimiento regular: Después de la rehabilitación, es importante realizar un mantenimiento regular para garantizar que la vía se mantenga en buen estado como por ejemplo, hacer una limpieza de las alcantarillas. Es necesario considerar que una vez estabilizado, el suelo sufrirá cambios y sus propiedades mejorarán de forma duradera, reduciendo la periodicidad de mantenimiento.

Es importante mencionar que la rehabilitación de vías rurales fomenta el desarrollo y la productividad o el rendimiento de las inversiones, un claro ejemplo son las agroindustrias que acceden a sus fundos a través de estos caminos. “Uno de los beneficios de usar materiales adecuados es que el mantenimiento de las vías deje de hacerse diariamente con soluciones paliativas o momentáneas,  ya que en ocasiones esto llega a perjudicar a las comunidades aledañas, encarece procesos y merma  las cosechas,  generando más costos a la operación”, finalizó la especialista.

Tomar en cuenta y aplicar estas recomendaciones motiva la creación y conservación de vías y la construcción de un país con mayor conectividad y equidad en lo que respecta a infraestructura vial.