Quienes se opusieron a la bicameralidad afirmaron que el costo a los peruanos sería mayor por mantener una Cámara de Senadores y una de Diputados, pero no es cierto, ya que el presupuesto del Congreso no puede exceder 0.6% del presupuesto del año.

Perú tendrá un Congreso bicameral a pesar que uno de los principales argumentos de quienes se oponían a la reforma constitución es el  “alto costo” que implica para los contribuyentes contar con más integrantes en el Parlamento. Sin embargo, se sabe que el presupuesto del Poder Legislativo no puede exceder del 0.6% del presupuesto del año fiscal lectivo.

 

Si bien es imposible conocer el monto aproximado que invertirán los peruanos en un Congreso con dos cámaras, conocemos que el monto va a variar en función del total de recursos disponibles anualmente en el Estado. Esto no se trata de un incremento caprichoso de sueldo de los padres de la patria sin sustento técnico.

 

Especialistas señalaron que quienes se oponen a esta medida no solo están preocupados por el costo extra que implica mantener dos cámaras, sino que también se encuentran angustiados por el control político. Es preciso mencionar que una sola cámara es mucho más sencilla de controlar a nivel político, mientras que contar con un Senado y una Cámara de Diputados implica que los proyectos de ley y demás cuestiones legislativas sean analizadas con mucho más detenimiento y reflexividad.

 

Si hacemos una breve comparativa entre el Congreso bicameral de 1992, éste contaba con un presupuesto de S/36 millones antes del Golpe de Estado de Alberto Fujimori. Para 1995, cuando ya se había conformado la Asamblea Constituyente que se encargaría de redactar la nueva Constitución Política del Perú, el monto que recibió este equipo de personas fue de S/66 millones. Casi el doble del dinero con el que contaba el Parlamento dos años antes.

 

Esto deja al descubierto que no necesariamente una única cámara congresal sea más económica que una doble cámara con más integrantes. Al contrario, esto beneficia a la ciudadanía en términos de representatividad, debido a que al contar con una Cámara de Diputados y un Senado cada 173,870 peruanos, en promedio, se vería representado por un legislador. Actualmente, un congresista representa una media de 254,118 habitantes.